La isla de Ibiza ha sido un punto de encuentro magnético desde tiempos ancestrales, la manera de sentir isleña y su ambiente bohemio y liberal la hacen un destino LGTBI+ paradisíaco donde lo que se hace con amor es celebrado por todo lo alto. The Purple Hotel es un referente en Sant Antoni de la atmósfera gay de Ibiza.

A primera hora de la mañana te recomendamos coger fuerzas en el restaurant de The Purple Hotel, Can Gian Luca, el personal se ocupará de darte los buenos días y satisfacer tus caprichos más dulces.

Con las pilas cargadas, estaréis listos para haceros a la carretera rumbo hacía una de las maravillosas opciones de calas y playas de Ibiza. El alquiler de un vehículo para moveros por la isla, sale mucho más rentable y supone a su vez un ahorro de tiempo importante.

Es Cavallet, situada en el Parque Natural de ses Salines, es una de las playas gay de Ibiza por excelencia, que además, fue la primera playa nudista y lo sigue siendo. Tomar una refrescante sangría en el mítico Chiringay o incluso, disfrutar de su delicioso menú, rodeados de hombres barbudos y sexys, aguas turquesas y una atmósfera de relax con un toque muy picante.

Después del día de playa podéis daros una ducha rápida en el mismo restaurante pagando unos pocos euros y visitar la ciudad de Ibiza. Os recomendamos que os dejéis perder por las callejuelas y callejones del casco antiguo de la ciudad hasta llegar a su parte alta, coronada por la catedral de Santa María la Mayor, un lugar con vistas panorámicas de la ciudad y el puerto de Ibiza, así como el cálido mar Mediterráneo y la vecina Formentera.

Imprescindible pasar por la Calle de la virgen, un auténtico santuario gay, donde la vida se convierte en un espectáculo para los sentidos, podéis desde comprar en sus múltiples tiendecitas, tomar algo o simplemente pasear y disfrutar de una atmósfera de diversión y color donde vosotros ponéis las reglas.